Durante mucho tiempo has estado esperando que tu empresa te diese la oportunidad de dirigir un gran proyecto de innovación. Hoy, por fin, ese día ha llegado, el equipo directivo acaba de comunicarte que piensan en ti como director del proyecto, pero siempre que los costes se ajusten al presupuesto disponible.

Debido al carácter innovador del proyecto, eres consciente de que la incertidumbre del trabajo a realizar no te va a facilitar la estimación, por lo que decides consultar las técnicas propuestas como buenas prácticas en la Guía PMBOK:

• Estimación análoga: conocida también como estimación top-down, se utiliza cuando se dispone de poca información del proyecto, cuando el proyecto presenta similitudes con un proyecto previo, o cuando las personas encargadas de realizar la estimación conocen el trabajo a estimar.
• Estimación paramétrica: esta técnica utiliza una relación estadística entre datos históricos relevantes y otras variables (ej: puntos función en software) para calcular una estimación del costo del trabajo del proyecto. Con esta técnica se pueden lograr niveles superiores de exactitud, en función de la sofisticación y de los datos que utilice el modelo.
• Estimación ascendente: conocida como estimación bottom-up,  se utiliza cuando se dispone de información detallada del proyecto. El costo de cada paquete de trabajo o actividad se calcula con el mayor nivel de detalle posible acumulando posteriormente estos costos en niveles superiores para fines de reporte y seguimiento.

A la vista de la información disponible decides hacer uso en un primer momento de la estimación análoga, y relegar el uso de estimaciones paramétricas o ascendentes para cuando se disponga de mayor información del proyecto.

Finalmente, y con objeto de mitigar tu entusiasmo por dirigir el proyecto realizando estimaciones optimistas, calculas el costo esperado del proyecto a partir de tres estimaciones de costos: más probable, optimista y pesimista.

Aunque el presupuesto que has obtenido entra dentro del tope que te fijó la dirección, añades un porcentaje de costo para dar respuesta a los riesgos conocidos (reservas de contingencia) y otra cantidad para los riesgos desconocidos (reservas de gestión).

Satisfecho con la estimación realizada, te diriges al equipo directivo con el presupuesto con el ánimo de que autoricen el proyecto al superar el presupuesto disponible los costes estimados del proyecto.